Despertar el niño interior

Despertar el niño interior que reside en lo profundo de nuestro ser, es despertar a nuestro mago oculto que después de años en el anonimato sale a enseñarte una nueva forma de vivir la vida.

Despertar: La palabra despertar se refiere a la acción física de dejar el sueño y pasar a la vigilia.

Niño interior: El niño interior es el conjunto de grabaciones guardadas de los 0 a los 7 años de edad que, de adulto, se están reproduciendo constantemente y afectan el comportamiento emocional.
Conjunto de experiencias guardadas desde la infancia en la mente inconsciente del ser, que al descubrirse potencializan al adulto del presente.

Cuando hablamos de despertar nos referimos a levantarnos del sueño que nos mantenía dormidos o desconectados de la realidad cotidiana.

Por otra lado, despertar al niño interior es más complejo y arriesgado, pues se requiere de agallas para hacerlo ya que se trata de un ser casi desconocido con el que perdimos contacto muchos años atrás, además no todos tenemos recuerdos gratificantes y hermosos sobre esa etapa de la niñez.

Despertar el niño interior es una aventura a vivir pues, a pesar de los temores que pueden existir en algunas personas por lo que pueden descubrir o encontrar al despertar el niño interior, temen encontrarse con hechos traumáticos del pasado que siempre quisieron ocultar o enterrar en el rincón más profundo, oscuro y misterioso de su inconsciente.

Sin embargo, no siempre se encuentra situaciones desagradables o poco gratificantes, muchos se encuentran con un sabio, maestro, guía, amigo o compañero de camino que posee miles de secretos hermosos y maravillosos que revelan tu grandeza y capacidades para alcanzar tus sueños, metas y objetivos y, lo más importante, te enseñan a ser más feliz y a tomarte la vida con amor, responsabilidad y sentido.

¿Cómo despertar el niño interior?

Para despertar el niño interior es necesario tener un buen motivo, itinerario o plan de acción, pues un niño que está dormido en su cama o zona cómoda no va a salir de allí simplemente porque le llaman, es necesario motivarlo, impresionarlo o causarle asombro con lo que tenemos para darle para que una vez esté despierto, se acerque a nosotros.

Una de las mejores formas de despertar el niño interior, es sanarlo mientras está dormido para que vivencie el proceso terapéutico como un sueño y luego al despertar tenga todo el vigor de un niño que en las mañanas se levanta con energía y ganas de jugar.

Al sanar tu niño interior el adulto que eres se equilibra, sana e íntegra con todo el maravilloso y feliz mundo del niño interior