Abraza a tu niño interior y permite que las cadenas que te atan se deshagan, liberando así una felicidad más profunda y auténtica.
Cuando éramos niños y jugábamos a las escondidas, el momento de ser encontrados o encontrar a los demás nos llenaba de una alegría indescriptible. Esa sensación de triunfo, de ser visto y valorado, era la mayor recompensa que podíamos recibir.
Esos fueron años maravillosos, en los que nuestra creatividad florecía como un jardín en primavera, mientras jugábamos y compartíamos con otros niños y niñas. Las actividades lúdicas nos sumergían en un mundo donde todo era posible y cada pequeño descubrimiento nos maravillaba.
Sin embargo, al crecer, muchos de nosotros perdimos esa capacidad de asombrarnos con las pequeñas y sencillas cosas de la vida. Nos alejamos de esos momentos mágicos en los que dos luceros en el cielo guiaban nuestros pasos, ayudándonos a construir caminos seguros para otros. La creatividad ilimitada de la infancia quedó olvidada.
Hoy, muchos adultos viven en soledad, desconectados de sí mismos y de los demás. La tecnología ha ocupado un espacio central en nuestras vidas, desplazando a las personas y afectando nuestra capacidad de experimentar felicidad, paz interior, y creatividad. Sin la conexión con nuestro niño interior, es difícil alcanzar la plenitud y la verdadera felicidad.
Te invito a ver este corto video.
Un adulto feliz es aquel que ha rescatado y sanado a su niño interior. Ha traído consigo las experiencias hermosas y gratificantes de la infancia, usándolas como cimientos para construir una vida plena y significativa.
Abraza a tu niño interior, incluso en medio de la incertidumbre. Cantar, danzar y agradecer en momentos de alegría es fácil y común. Pero hacerlo en medio de la duda, la tristeza o la indecisión es un acto heroico y poderoso. Marca la diferencia, no te dejes vencer por las pruebas del camino.
Cuando abrazas a tu niño interior en medio de la incertidumbre, desatas un poder oculto y misterioso que reside en lo más profundo de ti. Este poder te eleva, convirtiendo la incertidumbre en el combustible que te lleva a nuevas alturas de excelencia personal.
Aquí y ahora, abraza a tu niño interior, y verás cómo tu vida se transforma. Al hacerlo, estarás conectando con un poder desconocido y maravilloso, el contenedor de todas las posibilidades.
Pastor García es un destacado Terapeuta Especialista en Terapia Regresiva Reconstructiva y en escuchar Personas, Consejero Escritor y Coach cuyo trabajo ha influido en la vida de miles de personas en todo el mundo, actualmente reside en Medellín, Colombia. Nacido en una familia con antecedentes de Depresión y enfermedades psicosomáticas, Pastor García fue enseñado sobre la difícil situación de la condición humana desde una edad temprana.
«Lo que es más importante para mí, es que mis pacientes reciban una terapia excepcional, brindada en el contexto de apoyo incondicional, sin prejuicios, aceptación, seguridad y compasión».
Cuando sea apropiado, permíteme alcanzar tu pasado y resolver aquellas cosas que aún pesan en tu alma. Juntos encontraremos una manera de trabajar en ello y encontrar las mejores soluciones para ti.