10 Consejos para una escucha efectiva

Escuchará mejor y será escuchado si practica estos consejos:

1. Deja que otros cuenten sus propias historias primero.

Si les permite hablar primero, ahorrará tiempo. Cuando se revelan sus intereses, puede adaptar su discusión a sus necesidades, metas y objetivos particulares. Deje de perder el tiempo volteando frases que tardan mucho más en escuchar realmente a alguien. Tendrás tu turno.

2. Es imposible escuchar y hablar al mismo tiempo.

No interrumpir le permite a la otra persona mantener su línea de pensamiento. ¿Por qué no esperar hasta que se haga el punto del orador? Entonces, tendrás tu oportunidad.

3. Escuche las ideas principales.

Los hechos específicos solo son importantes en la medida en que se relacionan con el tema principal. Relacionar los hechos declarados con el hablante. Pregúntese: «¿A qué quiere llegar el orador?» O «¿Cuál es su punto?» Luego, obtén retroalimentación. Si adivina correctamente, su comprensión mejora y su atención aumenta. Si te equivocas, aprendes de tu error.

4. Lucha contra las distracciones.

Entrénese para escuchar atentamente las palabras de su cliente, a pesar de distracciones externas como el timbre del teléfono, los transeúntes u otros ruidos de la oficina. Centra tu atención en las palabras, ideas, sentimientos y la intención subyacente. Mejore su poder de concentración para que pueda bloquear las distracciones externas e internas y prestar total atención al orador.

5. Reaccione al mensaje, no a la persona.

No permita que su impresión mental del orador influya en su interpretación de su mensaje. Los buenos pensamientos, conceptos y argumentos pueden provenir de algunas de sus personas menos favoritas.

6. Utilice la retroalimentación.

Trata constantemente de verificar tu comprensión de lo que escuchas. No solo escuches lo que quieres escuchar.

7. Trate de no criticar, ni mental ni verbalmente, el punto de vista de la otra persona.

Permita que el hablante tenga suficiente tiempo para terminar completamente su línea de pensamiento. Es posible que descubras que aquello con lo que inicialmente ibas a estar en desacuerdo no era tan mala idea después de todo. Manten una mente abierta.

8. Escuche atentamente.

Mire al orador con los brazos y las piernas sin cruzar. Inclínese ligeramente hacia adelante. Establece contacto visual. Use movimientos de cabeza afirmativos y expresiones faciales apropiadas cuando se le solicite, pero no exagere.

9. Cree un entorno de escucha positivo.

Busca un ambiente privado lejos de las fuentes de distracción.

10. Haz preguntas.

Haga preguntas abiertas para permitir que el orador exprese sus sentimientos y pensamientos. Un simple sí o no no es suficiente. «¿Cómo puedo ayudarte?» «¿A dónde vamos desde aquí?» Las preguntas aclaratorias buscan información reafirmando los comentarios del hablante. El uso efectivo de preguntas también le permite contribuir a la conversación.